sábado, 13 de julio de 2013


PARA SEGUIR CONECTADOS


Uno puede enamorarse muy fácilmente a cierta edad, sobre todo si hace mucho tiempo que no lo ha estado y descubre una persona  diferente a todas las que ha tratado, fresca, risueña, llena de vida, independiente  y sincera.
Uno que ya ha caminado la mayor parte de su vida y ha tropezado en gran parte en ese camino, de golpe se siente atraído por una muchachita veinteañera, que apenas con decirle un par de palabras cariñosas, le roba para siempre el corazón y la razón.
La mayor parte de la relación fue a través de la red y un furtivo encuentro entre amigos que en eso quedó
Luego, fuerza  a ese ser libre e independiente a  un juego obsesivo, abrumándola con escritos, poesías y palabras de amor a toda hora, en su afán de conquistarla y rodearla de amor y afecto para no perderla nunca más. El resultado fue todo lo contrario a lo que deseó y en poco tiempo provocó en la muchacha una saturación tal que al no poder expresarlo, hizo que de a poco fuera dejando de comunicarse y contestarle, provocando en él un gran dolor y una angustia depresiva que casi lo vuelve loco.
Hubo una frase de ella casi al final de un diálogo donde le respondió, que tal vez  había un exceso de dulzura. El entendió  amargamente esas palabras y fue como si de pronto se le abriera el cerebro y entendiese  hasta donde había invadido la intimidad de la muchacha.
A partir de ahí , se produjo en este personaje un quiebre total, donde lucharon las fuerzas del bien y el mal encarnizadamente para lograr cada uno su objetivo, el bien tratando de hacerle olvidar ese amor imposible y el mal azuzándolo para continuarlo sin importarle de la muchacha ni de él mismo, buscando sólo la destrucción.
Debo decir aquí que para nuestro personaje fueron días terribles de grandes dolores, de angustias y pesares no creíbles y que tuvo que rumiar en silencio al no tener con quien compartir tanta desazón. Es que él realmente estaba…  en realidad lo sigue estando enamorado de la muchacha y eso no se terminará, pero ha entendido, sabe que realmente  si quiere que al menos perdure una amistad, debe tratarla como lo hacía antes , como una amiga … especial, a quien le pueda contar sus cuitas cada tanto y nunca más mencionarle sus verdaderos sentimientos.
Por eso  lo primero que logró fue cortar con el bombardeo de palabras y mensajes en el chat, entrar muy poco y a veces estar días sin entrar  en la red, para no tener la tentación de escribirle y así dejar de escribir y sobre todo de pensarla. Ocupó su tiempo en las tareas más disímiles como lavar su auto todos los días, baldear los patios del mismo modo, hacer dos horas de bicicleta fija, regar las plantas a la mañana y a la tardecita, jugar al ajedrez contra la computadora varias horas, ir al centro a mirar vidrieras sin comprar nunca nada, llenar crucigramas y mirar todas las policiales en el canal de series.
Es cierto que esto fue en temporada estival, donde todo el mundo está de vacaciones, lo cual le jugó en contra y el poco movimiento y la inactividad se complotaron para hacerle más difícil la situación, pero en un acto de alto valor digno de elogio nuestro personaje pudo de a poco controlar su muñeco interior, calmarlo y conformarlo y volver a un plano de “cordura” aceptable para tal sujeto y haber conseguido entrar como muy tranquilo a su habitación donde está la computadora y no abalanzarse sobre ella para saber algo de su amor.
Y finalmente ha conseguido lo más difícil y es  de vez en cuando conectarse con ella, de modo normal como lo hacen dos amigos, hablando de temas comunes o no tanto…ella todavía un poco a la defensiva y él un poco contenido, pero tratando de salir como sea de su propio caos, que casi lo hace pedazos, sin poder salir de ese amor que lo sigue lacerando, ahora menos traumatizante, hasta diría que dulcemente, y dejando en su alma la impronta de ese amor para siempre

                                                                                                    Asheclownhualot





No hay comentarios:

Publicar un comentario